Por casualidad, Tokitome Matsumoto termina asistiendo a una fiesta en una casa en una zona residencial de lujo en Setagaya e intenta encajar, pero debido a la obvia disparidad, lo tratan de manera hostil y con disgusto. Matsumoto, que ha desarrollado un sentimiento de alienación e irritación por el trato despiadado, detiene el tiempo y viola los cuerpos de niños y mujeres casadas como le place.