Reiko acaba teniendo una aventura con su hijo Akira. Por mucho que estuviera frustrada por su marido adicto al trabajo, era inaceptable. Aún así, no podía olvidar ese placer e intentaba tener sexo con su marido cuando él no estaba... El adolescente Akira estaba lleno de curiosidad y comenzó a presionar cada vez con más audacia por el sexo. Reiko gradualmente se vuelve incapaz de contener su deseo sexual...