Tatsuro, que termina viviendo con su tía, Hisayo, está preocupado por el hecho de que ella está demasiado loca por el sexo. Ni siquiera intentaba ocultar su ropa interior, mostrando su pecho y su entrepierna, y se masturbaba mientras gemía y gemía casi todas las noches... Tatsuro pasa esos días en agonía, incapaz de ocultar su confusión. Entonces, una noche, mientras Tatsuro se estaba bañando, Hisashiro entró de repente. A pesar de que Tatsuro estaba sorprendido.